Muchas veces nos pasa que no teníamos planeado salir en la noche de carnaval, o no pretendíamos disfrazarnos pero en el último momento aparece alguien que termina animándote a celebrar esta fecha. O quizá sean tus hijos los que olvidaron decirte que tenían que llevar disfraz al cole o que un amigo les ha invitado a una fiesta.
¡No te preocupes! Con un poco de imaginación y, en este caso, unos conocimientos muy básicos de costura, puedes salir del paso estupendamente.
Hay una serie de disfraces básicos que son los más socorridos para las prisas de última hora. Uno de ellos es el de abeja ya que con ropa de diario puedes disfrazarte perfectamente. En el caso de la imagen, han añadido a una camiseta amarilla unas tiras de tela negra fruncidas para hacer las rayas con más gracia. Las antenas son fáciles de hacer con una diadema y un poco de imaginación (si no, pásate por el tutorial de antenas de abejita que ya colgamos en el blog). Unos leggins o pantalones negros y unas alas que puedes comprar en cualquier todo a cien completan el resto del disfraz. Después, puedes añadir los detalles que tú quieras: un maquillaje llamativo, un tutú para hacerlo más carnavalesco…
Esta idea nos ha parecido genial. No puede ser más sencilla y además, permite ir protegidos del frío (lo cual se agradece en esta época del año). Se trata de disfrazarse de tiburón «tuneando» una sudadera gris que tengas por casa. Solo tienes que añadir con fieltro algunos detalles para tener el disfraz: unos dientes alrededor de la capucha, una aleta en la espalda (que puedes reforzar quizá con cartón o rellenar con algodón para que esté blandita) y un poco de tela blanca para marcar la tripa.
Estos son algunos ejemplos que pueden ayudarte a despertar la imaginación. Aunque en este caso estén diseñados para niños son perfectamente adaptables a adultos y, al no ser muy extravagantes, son aptos para aquellos que les gusta menos disfrazarse. Puedes ver algun otro ejemplo en el blog donde los hemos encontrado: Fiskars.