Cuando nos vamos de viaje, siempre nos gusta traer algo de recuerdo para nuestros amigos y familiares o para nosotros mismos. Puede ser una postal, un llavero, una camiseta, algo típico del lugar donde vamos… Si el destino es de playa, hay una frase clásica: «Traéme un poco de arena«.
Este año, fui de viaje a Punta Cana y una amiga me pidió que le trajera un poco de esa arena blanca y fina del Caribe. Como es un recuerdo algo especial, ya que es algo que no va a poder encontrar en otro sitio que no sea allí, decidí que la presentación fuera también especial.

La botella de cristal se compró en un «Todo a Cien» y costó 40 céntimos. Como ves, es un precio muy bajo para un resultado tan bueno. Después, puedes decorarla a tu gusto. Esta vez utilizamos un poco de cordel rojo y blanco anudado al cuello de la botella y una etiqueta blanca donde escribimos el contenido de la botella. Las etiquetas puedes diseñarlas tú mismo o bien buscar por internet uno de los cientos de «freebies» que vas a encontrar. El mío lo extraje de Write,Click,Scrapbook.
Si quieres compartir con nosotros tus recuerdos de viajes que has conservado de una forma original y diferente, envíanos tus fotos a triplebinfo@gmail.com