¡Oh, Dios mío!
¿Tú también llegas tarde a una de las últimas citas del año? ¿Te ha salido una fiesta a última hora y la presión no te deja pensar? O peor…¿has decidido quedar bien con tus amigos y, sin pensar, has dicho alegremente: «¡Este año, el Halloween lo organizo en mi casa!»?
No te preocupes, en algún momento de nuestra vida nosotras estuvimos en tu misma situación, así que te podemos aconsejar.
En nuestra primera entrega, vamos a ofreceros un disfraz que nos salvó el cuello hace unos años: el de Angel Caído.
El principal problema a la hora de disfrazarse de ángel es cómo fabricarse unas alas que sigan nuestra filosofía: buenas, bonitas y baratas.
Esta es la lista de materiales: Una caja de cartón grande, papel de periódico, papel de cocina, cola blanca, celo, agua, discos desmaquillantes, spray negro y tela negra.
Como véis, la gran mayoría de los materiales los podemos encontrar por casa y si no, aquí va nuestro principal consejo: visitar un todo a cien. Pero ya dedicaremos una entrada a hablaros de este grandísimo establecimiento.
Empezamos a trabajar:
1. Abre la caja de cartón y extiéndela por completo, así podrás comprobar que tamaño máximo pueden tener tus alas. Una vez lo hayas hecho, dibuja un cuadrado en el centro más o menos del ancho de tu espalda. Dibuja las alas junto a los lados del cuadrado. Es importante que las dibujes junto a él, porque será lo que las una y lo que te permita después colocarlas en tu espalda.
¡AVISO! Te recomiendo que utilices las partes grandes para cuadrar las alas, y las estrechas para el cuadrado, como te explicamos en el dibujo. De esta manera, los dobleces de la caja permitirán que las alas no queden rectas.
2. Recorta la forma de una sola pieza.
3. Haz rollos de papel de periódico. Para ello, coge las hojas completas y enróllalas sobre si mismas. Después, retuércelas para que queden unos churros finos.
4. Colócalas por todo el borde de las alas, por ambos lados, sujetándolas con celo.
5. Ahora viene el paso pringoso. Mezcla en un bol una parte de cola y dos de agua. Ahora, corta tiras de papel de cocina (o papel higiénico) y cubre el papel de periódico con ellas. Cada vez que pongas una tira de papel, aplica la mezcla con una brocha para fijarlo. Cuando hayas cubierto todo el papel de periódico, dejalo secar. Una vez este duro, repite el proceso para que quede más firme y grueso.
6. Cuando se haya secado, coge los discos desmaquillantes. Empezando por la parte inferior de las alas, rellena el hueco que correspondería a las plumas suporponiendo los discos. Fíjate el resultado final en la foto.
7. Una vez hayas rellenado los huecos tanto por delante como por detrás, llega el momento de pintarlas. Aségurate de cubrir bien la zona donde vayas a pintar con papel de periódico y con el spray de pintura negra, pulveriza las alas hasta que queden a tu gusto.
8. Con un trozo de tela negra, forra el cuadrado que une las alas. Puedes fijarlo al cartón mediante grapas o un pegamento que te permita pegar tela. Con la misma tela, fabrica unos tirantes que también fijarás a este cuadrado.
Y ya está. Acabas de terminar unas bonitas alas que seguro que no te habrán costado más de 5 euros.